La importancia del render radica más allá de innovación tecnológica y gráfica, ya que la apuesta de muchas empresas gira en torno al beneficio de la estrategia de marketing, además de la reducción de márgenes de error en la producción a la hora de imprimir o plasmar un render en algún material, también porque se utiliza para planear productos en funcionamiento junto con la manipulación de la estética del diseño al gusto del cliente, por lo que el proceso de renderización ha optimizado la planeación de un proyecto.

En los últimos años, las imágenes renderizadas se han convertido en una herramienta prevalente en diversas áreas como la industria, son vistas como un producto y un recurso de representación para ganar competitividad, ya que los clientes los comprenden con mayor facilidad; sin embargo, las herramientas que se utilizan para producir estas imágenes están modificándose constantemente, por lo que es probable que nos enfrentemos a una nueva era de técnicas de visualización que mitigan el margen de error, produciendo efectos visuales sumamente realistas en películas, videojuegos, espectaculares, impresiones en vinil, plástico o cartón.

La técnica del render en 3D es un buen recurso para generar ideas, en las que el cliente tiene la opción de crear y modificar diseños tantas veces como crea necesario, para que el proyecto tenga el aspecto deseado, de ahí que el margen de error se reduzca considerablemente. Por ejemplo, en arquitectura, el diseño es el valor más importante, es por esto que utiliza este tipo de presentaciones gráficas, ahorrando gran pérdida económica, reduciendo al 98% el margen de error; este último se ve reducido principalmente porque el modelo se visualiza y se representa (de manera virtual) antes de ser construido, facilitando la comunicación entre cliente y empresa, también da la posibilidad de modificar el diseño en su respectivo tiempo, pudiendo apreciar los materiales, colores y formas del proyecto.

Por su parte, el uso de opciones de edición como el zoom, la pantalla completa, manipulación de brillo o nitidez o adecuación de pixeles incrementa el impacto del proyecto y lo vuelve más atractivo que una fotografía o imagen, siendo un formato dentro de la visualización de empresas. Cuando se trabaja el margen de error en un programa de diseño 3D por computadora, normalmente no se visualiza en tiempo real el acabado  final de una escena 3D compleja,  ya que esto requiere una potencia de cálculo elevada, por lo que se debe crear el entorno 3D con una forma de visualización más simple y técnica, para luego general el proceso de renderización; normalmente cada aplicación de un render en 3D cuenta con su propio motor, pero existen plug-ins que se dedican a hacer el cálculo dentro del programa utilizando fórmulas especiales.

La renderización se aplica en cuestiones estéticas con el fin de imitar un espacio 3D, formado por estructuras poligonales, comportamiento de luces, texturas, materiales (agua, madera, metal, plástico, tela, vinil o cartón) y animación, simulando ambientes y estructuras físicas verosímiles.

La planeación de productos y estética por renders se ha visto beneficiada principalmente por la flexibilidad de manejo en el diseño del producto, pues gracias a ello, el cliente manipula aspectos de edición como brillo, realismo, efectos visuales, movimiento, color o nitidez, permitiendo la reestructuración estética del proyecto.

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